BENEFICIOS OCULTOS PILATES Y GARUDA
Somos muchos los que empezamos en este método atraídos por su elegancia, movimientos estilizados y los beneficios que asegura conseguir (mejorar dolores de espalda, prevenir lesiones, sentirnos más agiles y fuertes, relajarnos…)
En definitiva, una actividad apta para todos los públicos, que adapta cada sesión a las necesidades, y objetivos de cada alumno.
Pero lo que de verdad diferencia Pilates de otras actividades físicas siempre ha estado encerrado en el nombre que le puso su creador “CONTROLOGÍA”, definida como el control total de nuestro cuerpo por la mente. Así pues, si tenemos en cuenta los nuevos estudios en neurociencia corporal en la práctica de pilates contemporáneo podríamos afirmar “La atención es la toma de posesión de la mente, y por tanto nos permite seleccionar nuestra realidad”. Cada clase será un viaje a través de nuestros sentidos, La “Atención plena” y la confianza del alumno y del profesor son indispensables.
En el colegio estudiamos los 5 sentidos conocidos como exterocepción (vista, gusto, oído, olfato y tacto), faltaría añadir la interocepción y la propiocepción.
La interocepción, entendida como mirar hacia nuestro interior, es el proceso por el que nuestro sistema nervioso, detecta, interpreta e integra las señales del organismo con el fin de generar un mapa dinámico y constante, consciente e inconsciente. La parte más consciente son nuestros pensamientos y sensaciones en nuestro organismo. La interocepción nos ayuda a entender mejor nuestros sentimientos pues “no hay emoción sin respuesta corporal”, cuando te enamoras sientes “mariposas en el estómago”, cuando estás nervioso tu respiración se agita… El cuerpo expresa lo que la mente aún no sabe a través de mecanismos muy complejos, escuchar esas sensaciones es necesario para una buena comunicación cuerpo y mente, tantas veces bloqueada. Una disfunción en la interocepción conlleva problemas de salud general y mental, como ansiedad, bajo estado de ánimo e incluso trastornos adictivos…
La Propiocepción, percepción del cuerpo en el espacio. Los receptores sensoriales están situados en la piel, músculo esquelético, huesos y articulaciones para informar al cerebro de las sensaciones y la postura corporal. No necesitamos ver nuestros brazos para saber dónde están colocados. Movimiento, sensaciones y posición corporal están fuertemente relacionados. Un dato curioso: la espalda, pese a ocupar un tamaño considerable, recibe menos neuronas que el dedo meñique.
La propiocepción también influye en la percepción de nuestro entorno, nos permite comprender la actitud de otros cuando observamos su cuerpo y su movimiento. <<Viendo como camina alguien, podemos saber si ha encontrado su camino>> Nietzsche
Pilates trabaja la Interocepción y la propiocepción desde el momento que empiezas tu clase, a través de la respiración y el “mapeo del cuerpo” a través de las líneas fasciales y la activación y reconocimiento de patrones corporales, para después expresarse a través de esas líneas movimientos que ya no hacíamos o nunca habíamos llegado a desarrollar.
Es todo esto lo que hace tan especial al método, no son simplemente ejercicios elegidos meticulosamente por tu profesor, requiere de un gran compromiso de concentración por parte del alumno para hacer realmente Pilates.
Con todo esto podemos afirmar que el Pilates Contemporáneo y Garuda nos da todas las capacidades necesarias para usar nuestro cuerpo de una manera inteligente:
Mejora la atención y concentración.
Mejora la homeostasis
El estado de ánimo
Control motor
Variabilidad de movimiento (clave para cualquier proceso de readaptación)
Mejora la capacidad de captar y entender las señales de tu cuerpo
Ayuda a la memoria
Control de peso
Ayuda en programas de ansiedad y depresión
Mayor autoestima
Nos permite comprender mejor a los demás
Las personas con mayor consciencia corporal toman decisiones más acertadas.
Y un largo etcétera…
Como conclusión: el cuerpo entero es una fuente de información ya que es el “campo donde juegan las emociones, los pensamientos, la vida”. El organismo, las sensaciones que recibimos del cuerpo y nuestra postura influyen radicalmente en el cerebro.
FLOW PILATES es el resultado de integrar varias disciplinas en una práctica fluida de movimiento optimizando la toma de conciencia durante el ejercicio.